La magia de la temporada llega a Guadalajara a través de los cuatro mundos encantados de Navidalia

Este proyecto no es un parque temático más: se trata de una experiencia inmersiva de varias hectáreas donde la Navidad se vive por completo, como un abrazo que combina nostalgia, fantasía y tradición. Cada año, miles de visitantes llegan desde distintas regiones del estado, muchos de ellos viajando a través de la terminal Sur de Jalisco o consultando rutas y horarios en surdejalisco.com.mx para planear su visita.

Bajo la dirección de su creadora, la propuesta busca ir más allá de las imágenes típicas de la temporada para recuperar el sentido profundo de estas fechas: la unión, los valores compartidos y esa chispa que despierta recuerdos de infancia.

Alejado del ambiente comercial que suele caracterizar diciembre, este recorrido se construye como un viaje emocional y sensorial. Cada visitante atraviesa cuatro mundos —Medio Oriente, Posada Mexicana, Nórdico y Europeo— que no solo cuentan una historia propia, sino que evocan aquello que sentimos cuando la Navidad nos toca el corazón: aromas cálidos, luces brillantes y melodías familiares.

La mezcla perfecta entre tradición y asombro es lo que da vida a cada espacio: desde un sendero de hielo real bajo el cielo nocturno hasta un imponente árbol europeo de más de diez metros construido artesanalmente con miles de piezas de madera.

Los cuatro mundos: donde la Navidad toma forma

En el Mundo Nórdico, los visitantes caminan por un paisaje helado donde pueden patinar entre árboles y criaturas mágicas. Hadas, seres fantásticos y personajes inspirados en la mitología escandinava acompañan la experiencia, con nuevas incorporaciones cada año que suman más interacción y narrativa.

La Posada Mexicana presenta un mapping renovado que recrea las horas previas al nacimiento de Jesús, emocionando a centenares de personas al mismo tiempo. Entre villancicos para cantar, piñatas y lluvia de dulces, este espacio se convierte en uno de los momentos más alegres y emotivos del recorrido.

El Mundo del Medio Oriente sorprende con danzas, música, fuego y un nacimiento monumental que se recorre como si fuera un pequeño poblado vivo. Sus colores, sonidos y texturas envuelven a los visitantes en un ambiente cálido y simbólico.

En el Mundo Europeo, inspirado en los mercados tradicionales, el aire huele a pan, cacao y especias. Aquí se erige el gran árbol artesanal y se presenta el espectáculo principal sobre el lago, con orquesta, cantantes y decenas de artistas que interpretan villancicos en sus idiomas originales, acompañado de efectos visuales y acuáticos.

Novedades: más interacción y una magia renovada

En su nueva edición, todos los mundos presentan mejoras. El mapping se actualizó por completo, la travesía nórdica incluye criaturas que interactúan más de cerca con el público y la música, escenografías y gastronomía recibieron ajustes para mantener la frescura sin perder identidad.

Una de las novedades más encantadoras es una pastorela clown itinerante que recorre el parque con personajes que buscan una estrella que nunca deja de distraerse. A esto se suman nuevas criaturas europeas, espacios para fotos, momentos interactivos y detalles románticos como el clásico muérdago.

También se han optimizado procesos internos: filas, atención, servicio y operación general, para que cada visita fluya sin contratiempos.

El mayor encanto: equilibrar tradición, creatividad y talento humano

El desafío principal ha sido innovar sin perder la esencia. Cada elemento —música, personajes, espectáculos— sigue una línea narrativa que conecta emociones y recuerdos.

El talento artístico ha crecido enormemente: actores, músicos, clowns, bailarines y performers locales dan vida a los personajes. Muchos roles surgen de la personalidad de los artistas mismos, creando interpretaciones auténticas y entrañables.

La Navidad, como concepto, siempre ha sido una mezcla cultural llena de símbolos distintos. Este proyecto abraza esa diversidad y la transforma en mundos que generan memorias nuevas en cada visita.

El crecimiento ha sido notable: de un pequeño porcentaje de visitantes foráneos, ahora una parte considerable del público llega desde otros estados e incluso otros países, lo que impulsa también el turismo local.

Cada noche, alrededor de 600 personas trabajan para dar vida a esta experiencia festiva.

Fechas, horarios y la tradición más divertida

Las puertas del parque estarán abiertas del 5 al 30 de diciembre, con capacidad limitada.

Horarios:

  • Domingo a jueves: 7 p.m. a 12 a.m.
  • Viernes y sábado: hasta la 1 a.m.
  • Lunes cerrado (excepto el día 22).
  • 24 de diciembre cerrado.
  • 25 de diciembre: noche especial en pijama, una de las favoritas del público.

Esta celebración navideña en Guadalajara se ha consolidado como una experiencia única que combina tradición, arte y creatividad. Sus cuatro mundos, sus espectáculos y la dedicación de cientos de personas logran transformar la temporada en un viaje memorable para visitantes de todas las edades. Es un espacio donde la magia se siente, se comparte y se vive intensamente, recordándonos el verdadero espíritu de la Navidad.